Información sobre pesca con mosca en la Patagonia

La caña de mosca

Lo primero que debemos hacer al introducirnos en la pesca con mosca es elgir una caña que, a partir de ese momento, se transformará en nuestra compañera. El desconocimiento de todo principiante se entiende por la gran cantidad de modelos diferentes que ofrece el mercado. Sin embargo, elegir nuestra primera caña no debe tornarse algo complicado y difícil. Sólo es necesario tener en cuenta algunas recomendaciones.

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Un poco de historia

Hasta mitad del siglo XX, los pescadores con mosca utilizaban cañas de bambú. Con la llegada de los dorados años ‘60, se produjo una revolución en el empleo de materiales en la pesca deportiva. Así nacieron las cañas de fibra de vidrio, que fueron utilizadas rápidamente por casi todos los pescadores. Estas cañas, mucho más baratas y livianas que las anteriores, fueron utilizadas hasta mediados de los ‘70, cuando comenzó a experimentarse con nuevos materiales. Así surgieron las cañas de carbono o grafito, que lentamente fueron dejando atrás a las de fibra hasta que finalmente se extinguieron.

Más allá de su marca, los largos de las cañas que se fabrican actualmente oscilan entre los 4 y los 20 pies, utilizando líneas de pesca que van del número 1 al 15. Por toda esta variedad, es natural que en muchos casos, y sobre todo si se es novato, no se sepa qué caña elegir. Y esto sucede sin pasar a otro plano y sospechar que, además del largo y del número de línea correspondiente a cada caña, aparecen los diferentes tipos de acción que puede tener una caña.

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A la hora de comprar

Es recomendable comprar una caña de grafito o carbono de reconocida marca (las hay de diferentes precios) que, además de resultar accesible al presupuesto de alguien que recién se inicia (principiante), posee garantía de por vida. Esto significa que cualquiera sea el daño e incluso la forma en que éste se produjo, la caña será reemplazada por una nueva, ya sea que se haya roto pescando o cerrando la puerta del automóvil. En síntesis, comprar la caña una sola vez y para siempre. La compra de un equipo usado es otra de las opciones, pero conviene previamente asesorarse con algún amigo o conocido sobre la futura elección.

A un principiante que se introduce en este fascinante mundo, se le puede recomendar optar por una caña número 6 y 7 de carbono o grafito, con largos que van de los 8 a los 9 pies, resultando ideal para pescar truchas en ríos medianos y grandes y pequeños dorados en el litoral argentino. Este equipo básico es ideal para dar los primeros pasos.

Las cañas 1, 2 y 3 sirven para pescar peces chicos en pequeños ámbitos. Las 4 y 5 se utilizan para capturar peces más grandes en ríos medianos. Con cañas 6 y 7 se puede pescar importantes peces en ámbitos medianos y grandes, mientras que las cañas a partir del número 8 se utilizan para pescar en lugares muy ventosos y peces muy grandes, como suele ser el dorado.

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Nostalgia

Las cañas de bambú que son fabricadas a mano contituyen hoy un objeto de veneración para algunos pescadores con mosca. Su precio es muy elevado y, si bien su calidad es excelente, no son recomendadas para los que recién empiezan, ya que la técnica que éstas necesitan para castear correctamente es bastante dificil de obtener en las primeras salidas.

El reel de mosca

El reel de mosca

El reel no posee una importancia vital en la pesca con mosca. Se trata, en realidad, de un carrete cuya función principal es almacenar la línea. Sin embargo, de su adecuada elección dependerá el tipo de pesca que efectuemos y el éxito de ella.

Pequeñas diferencias

Si existen diferencias entre los distintos reeles para pescar con mosca, éstas se dan a través del sistema de freno. Los más sencillos presentan un freno de fricción que logra controlar la salida de la línea en caso que se produzca el pique de un pez de gran tamaño. Incluso, este tipo de reel puede también ser frenado con la mano en caso de que el pez continúe sacando línea. Los de mejor calidad poseen un sistema de freno a disco que permite mantener un importante frenado ante una eventual embestida del pez, sin necesidad de que el pescador tome el carretel con su mano.

El tamaño del reel se encuentra relacionado con el tamaño de los peces que vamos a pescar, por lo que se hace necesario calcular los metros de línea y backing que dicho pez puede llegar a demandar.

A su vez, el reel de mosca debe permitir en forma cómoda y rápida poder cambiar los carreteles, ya que en la pesca con mosca se utilizan líneas de flote (floating) y de hundimiento. Por eso, no está demás decir que en la caja de pesca deben existir las dos opciones. Lo fundamental a la hora de la elección de un reel es que su carretel pueda contener nuestra línea más el backing, que no es otra cosa que una reserva de línea de dracon que se torna indeformable y, por lo tanto, no se estira.

Actualmente existen reeles de excelente calidad para todos los presupuestos.