Parque Nacional Monte León, a orillas del mar

Monte León es un tesoro natural a orillas del mar que deslumbra a aquellos aventureros que recorren la vastedad de la Patagonia austral. En su carácter más agreste, este paraje revela una panorámica única que se fusiona con el Mar Argentino y la estepa, hogar de una biodiversidad excepcional. La geoforma que se despliega ante los ojos se asemeja a un león echado. De ahí el nombre del parque nacional.

Un faro natural

Monte León se presenta como una esfinge natural entre la estepa y el mar. Su perfil ha guiado a navegantes a lo largo de las épocas, marcando las rutas y las huellas de los aventureros. La esfinge es un faro natural que ilumina la belleza austral, fundiendo la soledad de la estepa en la majestuosidad del mar.

El Parque Nacional Monte León es hogar de una colonia de pingüinos de Magallanes. El sendero Pingüinera ofrece vistas panorámicas de la colonia que comienza a poblar las playas a partir de octubre. Además de la experiencia pingüinera, los visitantes tienen la oportunidad de avistar una amplia variedad de avifauna, incluyendo gaviotas, cormoranes, petreles gigantes, chorlos y palomas antárticas. Las aguas cercanas revelan la presencia de toninas overas y delfines australes, mientras que el sendero Lobería facilita las vistas de un apostadero de lobos marinos de un pelo. La experiencia se enriquece con el escenario de la estepa, el hábitat de pumas, choiques y guanacos.

Los visitantes pueden disfrutar de una caminata por la playa y conocer sobre la vida de aves y mamíferos marinos. Los senderos conducen a miradores y colonias de pingüinos y lobos marinos, agregando mayor atractivo a la experiencia. Además, se encuentra disponible un camping organizado, abierto desde noviembre hasta abril.

La ciudad más cercana es Comandante Luis Piedrabuena, ubicada a 32 km, en la margen norte del río Santa Cruz. Las calles de esta ciudad están impregnadas del arte que recrea las historias de los pioneros, siendo el punto de inicio del poblamiento de Santa Cruz en 1859, y los pueblos originarios, los tehuelches. Este lugar es un paraíso para la pesca deportiva, con especies codiciadas por los pescadores.

Una parte de las tierras del parque pertenecieron a una estancia de explotación ovina, que hoy solamente ofrece un vistazo de cómo era una estancia patagónica y la típica arquitectura de chapa y madera que caracterizó la región. La casa rural, de construcción inglesa de principios del siglo XX, estuvo habilitada como hostería en su última etapa.

Entre las recomendaciones para visitar Monte León, el camino de ingreso se vuelve impracticable cuando llueve. Por esta razón, para preservar la seguridad de los visitantes y el estado del camino, no se autoriza el acceso de vehículos al área costera hasta que las condiciones mejoren.